Me vestí para impresionar, siempre lo logro...La sensación es como de Reina sin trono ni súbditos.
Una copa de vino dos, tres, una Botella.
Bocas que hablan, Labios que impresionan y antojan, y yo.
Puedo ser la Diosa hoy, por un instante la gente esta a mis pies
pero no logro borrar ni nublar que las cosas pasan con un propósito o una conveniencia.
No se si la hija de puta soy yo, o aquellos que me hablan cosas que se no son verdades ,
y lo se, y finjo que creo.
Si las ganas me pueden, me ganare una cama, un cuerpo, un adiós y una culpa.
Ya no me siento capaz de hablar de culpas, porque para ello tendría que sentir algo y yo no siento nada.
Si fueran matemáticas, las estadísticas tan en contra, serian las putas culpables.
El amor que soñé, el hijo que perdí, la verdad que jamas fue, serian las sumas y las restas.
Pero es mi noche, soy la reina (me digo) y me miento, para estar tan IN como los otros.
Otra noche tan repleta de mentiras, que me regala un amanecer tan desnudo y tan déspota.
Los amigos, no son amigos, los amantes, no son mis amantes, los momentos que tampoco son míos.
otra puta noche tan vacía, tan sin ilusiones, tan sin promesas
tal cual yo.
Silvia Schöneke.
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